¿Sabías que las bolas de navidad se inventaron en la pequeña ciudad alemana de Lauscha a mediados del siglo XVI?
Al parecer en un principio San Bonifacio adornó el árbol con manzanas, representando con ellas las tentaciones. Hoy día, se acostumbra a colocar bolas o esferas (en algunas regiones también llamadas bambalinas o chirimbolos), que simbolizan los dones de Dios a los hombres. Las bolas navideñas representan los frutos de la vida y los anhelos de cada persona, como el amor, la esperanza, el perdón y la alegría.
Por eso no pueden faltar en tu decoración navideña.
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